ESCUELA DE MEDICINA

CURSO INTRODUCTORIO DE APOYO PSICOPEDAGÓGICO

miércoles, 28 de agosto de 2013


Estimados Alumnos:



Sean bienvenidos a este nuevo espacio de crecimiento profesional "PUNTO DE ENCUENTRO" diseñado especialmente para ustedes.



Les saludo Cordialmente:
Psic. Angélica Castan Gómez

martes, 27 de agosto de 2013

LA BIOÉTICA EN PERSPECTIVA LATINOAMERICANA / By: Rodrigo Hernán García, 2012.



La Bioética es más que un principalismo puro o deontología pura que orientan el trabajo diario del médico con los dilemas que se presentan o las relacio­nes interprofesionales. Debemos, por tanto, volver a las fuentes primigenias expuestas por Potter para practicar y difundir la Bioética con una visión holística y como una propuesta abarcante, en la que se integren la naturaleza y los seres vivos que viven un determinado momento histórico y sobre todo por los seres que vendrán.
Las clases burguesas reciben una asistencia mé­dica de tipo occidental, similar a la de los otros países del Primer Mundo, y se plantean los mismos problemas morales que hoy preocupan allí: la Autonomía de los pa­cientes, el Consentimiento Informado, el Rechazo del paternalismo, los Problemas de reproducción asistida, el Diagnóstico prenatal y trasplantes de órganos, entre otros. El problema del consentimiento informado deja de ser relevante cuando se vive en situación de gran penu­ria y se tiene como problema primario y cotidiano el de la alimentación y hasta el de la subsistencia. A este entorno social no llega la medicina de primer nivel, que es la que ha provocado el desarrollo de la Bioética en los países del Primer Mundo. Es por ello que la Bioética surgió como resultado de cambios de gran envergadura en la comprensión de la condición humana y en nuestra capacidad aumentada de transformar el cuerpo.
Los bioeticistas latinoamericanos, tratan de incluir otros temas como la Responsabilidad, la Solidaridad -que son temas nuestros, temas latinos - y la Dignidad humana, que algunos critican pues dicen que no se puede medir la dignidad humana. Nosotros los latinos no necesitamos medir y definir la dig­nidad humana sino que esto es parte de nuestro oxígeno de todos los días, es una cosa cultural. Hay teóricos latinoamericanos que incluyen otros te­mas al objeto de la Bioética Latinoamérica como es el caso de Volney Garrafa (1999, 263 - 269) quien argumen­ta que hay otros temas que él llama las cuatro “P” de una Bioética responsable para el siglo XXI: Protección de los vulnerables, Prevención de las enfermedades, Precaución frente a los posibles daños indeseables y Prudencia fren­te a cuestiones no totalmente conocidas en temas como transgénicos y tantos otros.
En el año 2005, por primera vez en la historia de la Bioética, la Conferencia General de la UNESCO aprobó la Declaración Universal sobre Bioética y Dere­chos Humanos, allí los Estados Miembros se comprometían, y comprometían con ello a la comunidad internacional a respetar y aplicar los principios fundamentales de la Bioética reunidos en un único texto. Se es consciente de lo que está en juego: ya no nada más lo relacionado con la tra­dicional ética médica, sino también el sentido de la vida humana misma en las fronteras en las que se encuentra la ingeniería genética en este mundo globalizado, es lo que permite hablar del futuro de la naturaleza hu­mana. Abordar los principios de Dignidad humana, de Libertad, de Justicia y de Derechos Humanos. Es asu­mir el marco de los clásicos principios de la Bioética: Beneficencia y No maleficencia.
El problema del consentimiento informado deja de ser relevante cuando se vive en situación de gran penu­ria y se tiene como problema primario y cotidiano el de la alimentación y hasta el de la subsistencia. A este entorno social no llega la medicina de primer nivel, que es la que ha provocado el desarrollo de la Bioética en los países del Primer Mundo. En consecuencia, pensar críticamente llevaría al fu­turo profesional a seguir el hilo de las evidencias hasta donde ellas lo lleven, tener en cuenta todas las posibi­lidades, confiar en la razón más que en la emoción, ser precisos, considerar toda la gama de posibles puntos de vista y explicaciones y sopesar los efectos de las via­bles motivaciones y prejuicios, estar más interesados en encontrar la verdad que en tener la razón, no recha­zar ningún punto de vista, estar consciente de nuestros sesgos y prejuicios para impedir que influyan en nues­tros juicios (BARRIO: 1998, 71-77).

*FAVOR DE REVISAR LOS PRIMEROS DOS COMETARIOS PUBLICADOS SOBRE ESTE TEMA (debajo del video dice "# comentarios"). Comentarios validos del jueves 31 de Oct. al 01 de Nov. de 2013.